Vistas de página en total

domingo, 14 de febrero de 2010


Muerta yo…

Tomo lo poco que queda de mí, quizá es un recuerdo gastado por la falta de importancia, quizá en un daño no olvidado, quizá en una sonrisa de antaño grabada por ahí, o en todas mis lágrimas esparcidas en murmullos de silencio, en mi boca, en mi piel, en mis años…
A veces pienso que hasta la misma muerte se me acabo, y ya no existo, es otra la que camina, la que respira, quizá sea otra la que se envenena en recuerdos para morir de nuevo, para morir descalza…
Mi vida y mi muerte, fueron condenadas a no dejar de sentir este grito que me despedaza, esos murmullos adheridos a mi piel…
Se me oprimen las ganas de seguir, viva o muerta.
Ya ni siquiera te pido que me mates, o que me regales vida.
Ya no pido nada, se me agoto la espera, se me enterraron las ganas de todo…
La dosis fue letal, y creí vivir años después, pero no fue así, pero no es así…
No tengo nada, más que un dolor llorando en los huesos… Sólo hay alguien que grita, que calla, que ríe para engañar, encerrada en mi cuerpo, destinada para nadie, muerta en silencio como yo…

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bienvenido (a)

Como los primeros rayos del sol, al amanecer, medio tímidos tocando el cielo entre sus brazos... Así puede que me sienta, dispuesta a abrazarte con lo que más amo hacer, escribir.

Muchas gracias por estar aquí, entre mis sueños y desvelos.

Un abrazo,


Fran Joan Violet